¿Qué son las pulseras antimaltrato y cuál es su función?
Las pulseras antimaltrato son dispositivos de control telemático utilizados en España para supervisar a los agresores con orden de alejamiento en casos de violencia de género. Estos sistemas permiten conocer en tiempo real la ubicación tanto del agresor como de la víctima, alertando a las fuerzas de seguridad si se produce una aproximación indebida.
Durante años, las pulseras antimaltrato en España se han presentado como una medida pionera y efectiva para garantizar la seguridad de las víctimas y reforzar la aplicación de las órdenes judiciales.

El fallo de las pulseras antimaltrato en España
En los últimos meses salió a la luz un fallo en el sistema de pulseras antimaltrato, que afectó a la protección de víctimas de violencia de género durante el proceso de cambio de empresa adjudicataria del servicio.
El problema surgió por errores en la migración de datos, lo que impidió a los juzgados disponer de información completa sobre el seguimiento de algunos agresores. Como consecuencia, hubo sobreseimientos provisionales y absoluciones, ya que no se pudo demostrar el quebrantamiento de órdenes de alejamiento.
Polémica social y política
Este fallo generó una fuerte controversia social y política. Mientras el Ministerio de Igualdad defendía que “las víctimas estuvieron protegidas en todo momento”, asociaciones y colectivos de mujeres denunciaban la pérdida de confianza en un sistema que debería ser infalible.
El debate se centró en una cuestión clave: ¿es suficiente la tecnología antimaltrato si no existen garantías absolutas de funcionamiento?
Consecuencias para las víctimas
Para las víctimas, la fiabilidad de las pulseras antimaltrato es más que una cuestión técnica: es su vida y seguridad.
El fallo del sistema generó una gran incertidumbre y desconfianza. Muchas mujeres declararon sentirse más vulnerables, temiendo que la pulsera no funcionara correctamente en el momento crítico. Este impacto psicológico agrava aún más la situación de las víctimas, que ya viven en un estado constante de miedo y alerta.
Pulseras antimaltrato desde la criminología y la criminalística
La criminología y la criminalística pueden aportar un enfoque esencial en el análisis de las pulseras antimaltrato. Estas disciplinas no solo estudian la conducta criminal, sino que también evalúan la eficacia real de los sistemas de prevención y protección.
Algunas aportaciones desde este campo serían:
- Auditorías periódicas para verificar el funcionamiento del sistema de pulseras antimaltrato.
- Evaluación criminológica del impacto, analizando cuántos delitos se han evitado gracias a estos dispositivos.
- Protocolos técnicos para garantizar que los datos telemáticos tengan validez judicial.
- Formación específica en criminología aplicada a la violencia de género, para reforzar la prevención.
Conclusión: ¿podemos confiar en las pulseras ?
El caso del fallo en las pulseras antimaltrato en España ha demostrado que no basta con implementar tecnología: hay que asegurar su fiabilidad y transparencia.
Cuando se trata de víctimas de violencia de género, el margen de error debe ser cero. La criminología y la criminalística pueden desempeñar un papel clave en auditar y perfeccionar estos sistemas, evitando que un fallo técnico se convierta en un fallo estructural de protección.
Las pulseras antimaltrato son una herramienta valiosa, pero necesitan una supervisión constante para garantizar que cumplan con su función más importante: proteger vidas.